Los precios suben al ritmo más rápido en más de 40 años

La tasa de inflación en el Reino Unido subió al 9,4% en junio, frente al 9,1% de mayo. Las impactantes estadísticas de la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS) también muestran que los precios de la gasolina aumentaron la asombrosa cifra de 18,1 peniques por litro solo en junio.

No solo los usuarios de gasolina sienten la tensión. Aunque los precios de la gasolina se situaron en un promedio de 184 peniques por litro en junio, el precio más alto desde que comenzaron los registros hace más de 30 años, el precio del diésel en el mismo mes alcanzó la sorprendente cifra de 192,4 peniques por litro, otro récord. Estas subidas de precios, según la ONS, son el resultado de la guerra en Ucrania y de que la Unión Europea reduzca lentamente su dependencia del petróleo ruso.

Aunque los precios mayoristas del combustible han bajado muy levemente, los costos siguen siendo exorbitantes en comparación con este período en 2021. Ahora cuesta más de £ 100 llenar un automóvil familiar promedio, lo que ejerce una presión aún mayor sobre las familias y las personas por igual.

El costo de los productos alimenticios como la leche, los huevos y el queso también aumentó en junio, y los británicos en apuros sintieron aún más la presión sobre estos alimentos esenciales. De hecho, la ONS ha sugerido que esta es la tasa más rápida en que los precios de los alimentos han aumentado desde 2009. No fueron solo los lácteos los que aumentaron en costo. El precio de las verduras y la carne también se disparó en junio.

Se estima que las facturas de los supermercados aumentarán aproximadamente £454 solo este año. Como resultado del aumento de los precios de los alimentos, los precios de los restaurantes también han aumentado. En el año hasta junio, los precios de las comidas en restaurantes aumentaron un 8,6%, otro golpe más para los consumidores y, posteriormente, para la industria de la hostelería y la restauración.

Aunque el canciller Nadhim Zahawi dice que el gobierno está haciendo todo lo posible para acabar con la inflación, junto con el Banco de Inglaterra, para muchos consumidores, la crisis del costo de vida se está convirtiendo en una tensión demasiado difícil de soportar.