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Peonzas nuevas, la moda de lo vintage.

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Emprender un negocio es un paso complicado y más si tu idea es fabricar peonzas nuevas. En un momento en que las dudas se hacen mucho más presentes que nunca y la inseguridad puede llegar a jugar malas pasadas. Pero ese miedo inicial puede ser solamente la tormenta que precede a la calma. Iniciar un nuevo negocio es innovar, pero en ocasiones no tiene que ser necesariamente la aparición de un nuevo producto creado desde cero.

En la historia de la humanidad han existido productos que han caído en el olvido con el tiempo pero que tienen un sinfín de posibilidades en la actualidad.

Esta fue la idea de Javier Caballero y su padre Francisco quienes supieron traer de actualidad un producto que había estado en las vidas de nuestros abuelos, un producto que con el paso del tiempo había sido relegado y solamente necesitaba un pequeño empuje para que todos pudieran disfrutar de ellos, tanto consumidores como sus fabricantes que encontraron un negocio más que rentable.

Se trata de las peonzas. Javier y su padre tenían un taller de carpintería en un pueblo de apenas 800 habitantes. El taller no pasaba por su mejor momento y las preocupaciones comenzaban a aparecer con demasiada frecuencia en sus vidas.

En los periodos en que el trabajo flaqueaba bastante decidieron emplear su torno para hacer peonzas, ese clásico juguete que en otra época fue el rey de las calles. Unas pocas unidades de este juguete acabaron en las manos de unos niños que pronto divulgaron la voz creando una gran expectación, iniciando una vía de negocio muy interesante para padre e hijo.

Peonzas Nuevas algo direntes

Pero tener una buena idea, volver a traer a la actualidad algo que hace tiempo tuvo un éxito considerable no es garantía de nada en el mundo de los negocios. Javier y su padre tenían muy claro que para poder hacer negocio de esta nueva línea que se abría en su panorama debían conseguir diferenciarse de los demás, necesitaban una seña de identidad que les hiciera únicos en el mundo de las peonzas.

Apostaron por un nuevo modelo de peonza en la cual incorporaban un rodamiento en la punta de la misma de manera que giraba de forma independiente, creando lo que se conoce con el nombre de roller. Este paso les permitió abrir sus fronteras aumentando la demanda de su nuevo producto.

La innovación combinada con la tradición permitió crear un nuevo juguete que hace las delicias de pequeños y mayores.

Innovación constante, un requisito imprescindible

Pero esto solo era un paso en el largo camino de conseguir el éxito y mantenerse en la cima. Con esa idea, apostaron por aplicar todo lo que la ciencia y la investigación I+D tenía que decir en el campo de las peonzas. Se comprometieron a sacar cada año tres nuevas novedades de peonzas.

De este modo nacieron la peonza Saturno que permitía realizar trucos y acrobacias que con otras peonzas era imposible, la peonza Neptuno realizada en metal de acero inoxidable, la peonza Pegasus disponible en versión de punta fija o con rodamiento y un largo etcétera en un camino hacia la cima del universo de las peonzas.

Crecer, alcanzar nuevos mercados

Un objetivo claro cuando se quiere crecer desde el punto de vista empresarial es llegar a otros mercados y países. Javier y su padre lo tenían muy presente y comenzaron a plantearse implantar su modelo de negocio en países como Holanda.

Para conseguir reproducir fielmente los principios y objetivos que cumplían en España no dudaron en traer a un equipo de holandeses para que conocieran el producto desde todos los puntos de vista, aprendiendo el proceso de fabricación, promoción e incluso a bailar las peonzas para conocer todas las ventajas que la innovación había creado en este juguete.

Un negocio no es rentable si no es sostenible

Como es normal, para comenzar cualquier tipo de actividad empresarial lo normal es que se deba contar con fondos procedentes de un crédito. Pero necesitar constantemente este tipo de financiación no es bueno para ningún negocio.

Para ser rentable, toda empresa tras un cierto tiempo de actividad tiene que ser capaz de disponer de los fondos necesarios para mantenerse. Este principio es el que Javier Caballero aplicó a su negocio de peonzas conocido con el nombre de Trompos Space que asegura que solamente tuvieron necesidad de pedir un crédito para la creación de sus primeras unidades después de las cuales reinvirtieron sus ganancias para seguir fabricando este producto exitoso.

Ganar dinero para seguir creciendo esa es la idea que un negocio en el camino del éxito debe tener, dado que es la mejor manera de no depender de fondos ajenos sino de ir autofinanciándose con los propios beneficios obtenidos de este ascenso continuo.

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Hacerse siempre presentes

Otro problema con el que Javier Caballero se encontró cuando decidió comenzar su negocio de peonzas es que el mundo del juguete está especialmente enfocado a periodos como Navidad, donde las ventas son mayores. Eso es un inconveniente muy importante que no debe perderse de vista cuando se intenta triunfar con ciertos tipos de productos. La innovación en esos casos es la mejor arma.

Javier Caballero supo crear un producto tan especial, tan novedoso, aunque estaba basado en un juguete que había existido desde hacía muchos años que se ha convertido en un referente que no tiene nada que ver con la Navidad. Alejarse lo máximo posible de la estacionalidad es un objetivo claro para conseguir los mayores beneficios.

Trompo Space cuenta con unos productos tan increíbles, fruto de la combinación perfecta de un modelo de negocio basado en el avance constante con los propios beneficios obtenidos y de la investigación y desarrollo de nuevos modelos, que son los protagonistas de videos de piruetas, de eventos especiales de peonzas, etc., estando siempre presentes sea cual sea la época del año.

Una idea tan sencilla como volver a jugar con peonzas ha sido la semilla para crear un negocio tan interesante como Trompo Space. Un sencillo taller de carpintería que hoy día cuenta con la presencia de sus productos en numerosos países del mundo, y que continúa creciendo.

Puedes ver las Peonzas Trompos Space